Norte de Etiopia: del cielo de las Simien al infierno del Danakil. Trekking Simien segunda etapa.

Norte de Etiopía. Tercera parte: trekking macizo de las Simien de Geech a Chennek (2º etapa).  

Duración: 7 horas
Dificultad: Media

(9 de Noviembre de 2018)

Segunda etapa del trekking de las montañas Simien, tras la que podríamos catalogar como media etapa del día anterior. En este caso si que podemos hablar de una etapa más larga y dura, sobre todo por transcurrir siempre por encima de 3500 m de altura. No obstante el desnivel es inferior a 1000 metros, sin grandes pendientes, y es asequible sin problemas para una persona mínimamente entrenada, especialmente si, como en nuestro caso, llevamos ya 3 días por encima de los 2000 m de altura. 

Tras unos minutos fotografiando de nuevo a nuestros queridos cuervos, salimos los primeros del campamento. Mejor, sobre todo para el avistamiento de fauna. Tras desayunar bastante bien tomamos un camino a media ladera que nos llevará entre lobelias gigantes al primer pico del día: el Imet Gogo, con 3926 m de altura. Lástima esos poco menos de 80 metros para ser un 4000. El dia amanece soleado, pero con nubes en las cimas, que nos taparán intermitentemente gran parte de la etapa. 

Saliendo del campamento de Geech. Se ve el camino perfectamente. 

 Mirando atrás las tiendas del campamento. El resto de grupos estaba por salir. 

La niebla nos envuelve. Será una constante la mayor parte de la jornada. 

Fastasmagórico aspecto de las lobelias gigantes (Lobelia rynchopetalum). 

El sol vuelve a lucir de nuevo. Al fondo está el campamento, tapado por las nubes. 

Vicente, Josep y Wende por el estrecho camino. 

Al fondo el Inatey, de 4070 m, por el que pasaremos más tarde. 

Fantástica panorámica desde un collado. A la derecha el Imet Gogo. 

Detalle de las agujas y farallones característicos de las Simien. 

Panorámica con el Imet Gogo (3926 m) a la izquierda y al fondo el Inatey (4070 m). 

Toda esta vertiente cae a pico centenares de metros. 

Mirando atrás vemos la ladera por la que luego descenderemos. 

Cresta final, fácil de ascender, al Imet Gogo. Aquí mismo me sorprendió ver, 

como vereís al final de la entrada, unos enormes francolines, que

por tamaño parecían más un perdigallo (o "perdicaspio"...). 

Un corto descenso nos lleva a esta maravillosa ventana. 

Mirando atrás vemos la cresta. Nuestro scout nos esperó al solecito. 

En la cima del Imet Gogo, envueltos por la niebla. Lástima porque la 

vista hacia los valles debe de ser impresionante. 

Toca ahora retroceder por la cresta, donde coincidimos con el resto de los grupos del trekking, para luego tomar una loma, bordeando los abismos, para descender hasta el fondo del valle, justamente hasta la cabecera del valle del río Jinbar. Desde allí tocará el ascenso más duro de la jornada por la ladera opuesta, hasta alcanzar de nuevo los farallones dominados por cumbres de 4000 m, entre ellas el Inatey. 

 Empezamos a descender hacia la cabecera donde nace el río Jinbar. 

 

Seguimos una suave loma que bordea los cortados envueltos por la niebla. 

Valle del Jinbar. En las partes altas dominan las lobelias

gigantes y por debajo los brezos blancos (Erica arborea). 

La lobelia parece que nos dice que es imposible bajar por aquí. 

Se aprecia perfectamente el camino del descenso. 

Las laderas son muy verticales, pero llenas de vegetación. 

Wende y Asfoud esperándonos mientras hacemos fotos. 

Seguimos descendiendo dejando atrás la cresta del Imet Gogo. 

Alcanzamos la zona en que los brezos sustituyen a la lobelias y me quedo extasiado con el contraste entre los líquenes colgantes, que parecen barbas de algún anciano mago del Señor de los Anillos, y las expectaculares flores del género Kniphofia (K. uvaria, posiblemente). Ahí van unas cuantas imágenes. 

Mirando atrás el Imet Gogo entre nieblas (3926 m). 

De ahí venimos precisamente. 

Alcanzado el fondo del valle un estrecho camino recorre el abismo. 

Sí Vicente: hay un barranco del copón...

Estos líquenes dan idea de la alta humedad de estas montañas. 

Cabecera del rio Jinbar. En la lobelia una pareja de Slender-billed Starling. 

Luego vereís las fotos, porque se dejaron fotografiar muy bien. 

Detalle de una flor incipiente de lobelia. 

Viene ahora la parte mas "dura" de la jornada, que es la ascensión hacia las lomas que caen a pico hacia el Norte, dominadas por el Inatey, de 4070 m de altura. El camino es muy agradable, primero por un bosque de brezos y luego por las praderas "alpinas" con las lobelias gigantes.  Paramos para comer en el Inatey, aunque el último pico del plateau me pareció el más alto. No obstante tampoco tiene importancia, ya que pasamos a su lado, aunque sin asomarnos al abismo por la niebla. 

Alucinante ascenso entre brezos cargados de líquenes. 

Vicente, Josep y Asfoud posando en el embarrado camino.  

Cabecera del rio Jinbar. Al fondo está la cascada del primer día del trekking. 

Líquenes, musgos y texturas. 

Parada a medio camino, aunque no estábamos nada cansados. 

Al fondo y a media altura está el campamento de Geech. Dejamos

 los brezos y entramos en el dominio de las lobelias. 

Ya queda menos para llegar al Inatey. 

 Antes de llegar una canal desciende vertiginosamente. Dudo que sea transitable. 

Detalle de la canal. 

Y detalle del gendarme que la custodia. 

Vicente en pleno ascenso por el plateau. 

Un último repecho nos lleva a la cima. 

Vista desde el Inatey (4070 m) de la meseta final de esta parte de las Simien. 

Aprovechamos para comer resguardados justo debajo de esta cima, antes de empezar el descenso hacia el campamento de Chennek. Las vistas hacia el Imet Gogo entre la niebla eran muy bonitas y sobre todo cambiantes. Ahí van unas cuantas imágenes. 

Panorámica desde nuestro "comedor" del Inatey. Desconozco 

el nombre de los dos salientes a izquierda y derecha. 

 

Paisaje mágico debajo del Imet Gogo. 

De atrás a adelante Imet Gogo,  espolón innominado y el pico donde estamos, 

el Inatey, cuya traducción es de lo más curiosa: ¡Ay mi madre!

Los auténticos reyes del lugar: cuervos y quebrantahuesos. 

Última cumbre, por encima nuestro claramente. Debe estar alrededor de los 4100 m. 

Tiene un "patio" destacable, sin duda. 

Wende se pegó una siestecita mientras comíamos. 

Los habituales chavales que venden refrescos y recuerdos. 

Tras coronar las lomas que conducen a la última cumbre empezamos el descenso hacia el campamento de Chennek. El camino desciende bordeando los cortados, para luego realizar un largo flanqueo sin apenas perder altura hasta la pista que conduce al campamento. Una corta subida nos llevará hasta los 3620 m de altura de Chennek. A pesar de la niebla el camino se nos hizo muy agradable. Vimos muy bien a un quebrantahuesos y a un halcón, como vereís luego. 

Transitando por la meseta o plateau. 

Empezamos a descender buscando salir de la niebla. 

Dejamos a la izquierda los farallones que caen hacia el fondo de los valles. 

El paisaje sigue siendo irreal. 

Quien sabe si se puede bajar por aquí...

El sol va y viene.

Cualquier momento y lugar es bueno para venderte algo. 

 

El camino se vuelve más estrecho, a pesar de ser transitado por pastores y rebaños. 

Como podeís ver en la imagen.  

Debajo se ve una localidad, de la que vienen los pastores.  

Casi todo está admirablemente cultivado, a pesar de la altura, superior a 3000 m. 

Seguimos bajando al borde de los cortados. 

Vale la pena aislar estos detalles. 

Magia en los acantilados. 

Más jóvenes y chiquillos, pastoreando e intentando vendernos algo. 

 Es increíble como cultivan laderas con tanta inclinación. 

 Volvemos a encontrar a un grupo de geladas. 

Llegando a la pista. Al fondo está el campamento de Chennek. 

Seguimos con la fotografía etnica. 

"Bosque" de lobelias en el río cerca de nuestro campamento. Me pegué un baño 

a plazos que me sentó de fábula, a pesar de que no hacía demasiada calor. 

Llegamos a la pista. Queda ya muy poco para el campamento. 

Vicente haciendo estiramientos en el campamento de Chennek. 

Tras bañarme tuvimos un buen rato para pasear por los alrededores del campamento, a pesar de la niebla. Siempre se puede encontrar algo interesante para fotografiar. Como lloviznaba cenamos en los chiringuitos donde cocinaban y dormían los cocineros y muleros. De nuevo la cena fué impecable: sabrosa y abundante. En general teníamos una sopa caliente y pasta, arroz, verduras y carnes de segundo, acompañados de pan y luego un té junto al fuego. Las imágenes no precisan comentario. 

Fauna de las Simien (2º etapa)

Aunque no fué una etapa tan "productiva" faunísticamente hablando, si que estoy contento por los "bimbos" y por un par de imágenes que me quedaron bastante bien. De hecho fijaros que he cambiado la foto del encabezado del blog. Aunque no vimos a ningún lobo etíope, pudimos ver unos topillos bastante abundantes en el plateau del Inatey (no eran la rata-topo gigante) y un curioso antílope. Al principio creí que eran corzos introducidos, pero se trata de un oribi (Ourebia ourebi). Puede parecerlo de lejos, pero el cuerno es recto y sin bifurcaciones. 

En el campamento de Chennek habían muchísimos geladas (Theropithecus gelada), que comían hierba tranquilamente al lado de las tiendas. Tanta pasividad hacía que hacerles fotos casi careciera de emoción. En realidad era más que suficiente con el móvil o un objetivo normal. 

Por último, pasamos a las aves. Ya he comentado que al ser la etapa relativamente larga no me podía entretener demasiado, pero al inicio y al final pude dar un paseo por los alrededores de los dos campamentos y hacer alguna foto aceptable, aunque lo mejor, como vereís, fué casi al final de la etapa, ya a la vista del campamento de Chenek. Empezamos por el siempre conspicuo Thick-billed Raven (Corvus crassirostris). Las primera fotos son del campamento de Geech, la de la niebla en el campamento de Chennek y las siguientes en la cimas alrededor del Inatey, a 4000 m. 

 

Continuamos con otra pequeña ave que ya ví el dia anterior, a contraluz. Esta vez las condiciones de luz eran mejores. Se trata de unos bonitos machos de Ethiopian Siskin (Serinus nigriceps), en los alrededores el campamento de Geech.  

Siguiendo con el orden cronológico, el ratonero más común en las Simien: el Augur Buzzard (Buteo augur). Bimbo, por cierto. Es muy bonito, pero desgraciadamente lo vi desde muy lejos y las fotos son testimoniales. Llama mucho la atención su pecho y cara ventral de las alas de un blanco muy llamativo y la cola muy rojiza. 

A continuación una grata sorpresa y de nuevo bimbo: un enorme francolín llamado Erckel's Francolin (Pternistis erckelii). Era tan grande que al principio me pareció un perdigallo o un lagópodo, ya que lo vimos a 3900 m, justo debajo de la cima del Imet Gogo.  Según la Guía sólo llega a 3000 m, pero la identificación no ofrece dudas.

Debajo del Imet Gogo y en el campamento de Chennek volvimos a ver de nuevo a la collalba llamada el Red-breaster Wheatear (Oenanthe bottae). Otra collalba más para la colección. 

Tras bajar del Imet Gogo vimos una pareja de Slender-billed Starling (Onychognathus tenuirostris), alimentándose del polen de una lobelia. Pude sacar el teleobjetivo y fotografiarlos a placer, aunque no se dejan acercar demasiado. Ahi van unas cuantas imágenes. 

 

En los alrededores del campamento de Chennek pude pajarear un rato a pesar de la niebla. Pude fotografiar alimentándose en el suelo al muy común  Brown-rumped Seedeater (Serinus tristiatus). Es como los gorriones aquí. 

Y cayó un nuevo bimbo entre la niebla: Streaky Seedeater (Serinus striolatus). A pesar de la luz estoy contento con las imágenes. Realmente el sensor de la A6500 es francamente superior al de la A77.  

 

Dejo para el final un nuevo bimbo. Se trata del Lanner Falcon (Falco biarmicus). Es un precioso halcón, del tamaño de un peregrino, aunque a mi me pareció más grande. Se podría confundir con un halcón de Berbería, pero éste tiene menos bigotera, la cabeza menos rojiza, es algo más pequeño y no está en las Simien habitualmente. Lo vimos posado en una roca justo antes de llegar al campamento de Chennek. Creo que fué Vicente quien lo vió. Saqué el tele y me dejó acercarse bastante hasta levantar el vuelo. Vereís que lo he inmortalizado en la cabecera del blog y se merece acabar esta entrada. 

Enlaces a las otras entradas de Etiopía. 

Primera parte: Las iglesias excavadas en la roca de Lalibela. Pinchar aquí.  

Segunda parte: Gondar. Pinchar aquí. 

Tercera parte: Trekking Simien primera etapa. Pinchar aquí. 

Tercera parte: Trekking Simien tercera etapa. Pinchar aquí. 

Tercera parte: Trekking Simien cuarta etapa. Pinchar aquí. 

Tercera parte: Trekking Simien quinta y sexta etapas. Pinchar aquí. 

Cuarta parte: Axum. Pinchar aquí. 

Cuarta parte: Axum, flora y fauna. Pinchar aquí. 

Quinta parte: Tigray. Pinchar aquí. 

Sexta parte: La depresion Danakil. LLanuras de Sal y el Dallol. Pinchar aquí. 

Sexta parte: La depresion Danakil. El volcán Erta Ale. Pinchar aquí. 

Etiopía en blanco y negro. Pinchar aquí.