jueves, 27 de septiembre de 2018

Cumbres de la Península Ibérica: Veleta y Mulhacén

Ascensión al Veleta y Mulhacén en Sierra Nevada.  
(11 de Septiembre de 2018)

Datos técnicos: 26 Km, 1600 m de desnivel positivo, unas 10 h de marcha con paradas. Hay que llevar agua y comida para todo el trayecto. 

Inicialmente era una salida del Centro Excursionista de Parets (CEP) en la que yo iba a quedarme unos días más en Granada visitando a la familia y, especialmente, a mi querida tia Encarna, gemela o mejor dicho melliza, de mi madre. El mal tiempo el fin de semana hizo que se anulara. 

Afortunadamente Cristian, compañero del CEP, también se quedaba unos días en Granada con la familia de su mujer, por lo que aprovechamos  el martes 11 de Septiembre para hacer las dos cimas previstas de una tacada, cosa perfectamente factible con un mínimo de forma física. 

Ascensión totalmente recomendable. sin dificultades técnicas, a los techos de la Península Ibérica. Es un macizo muy diferente de Pirineos, más pedregoso, sin bosques hasta cotas altas, notorio por los múltiples endemismos, entre los que podemos destacar la mariposa apolo de Sierra Nevada y la famosa manzanilla de Sierra Nevada. 

No obstante hay que recordar que se trata de Alta Montaña, con mayúsculas, por lo que hay que ir con un buen calzado, ropa de abrigo ya que puede nevar incluso en verano, agua y comida suficientes, ya  que los refugios guardados están bastante bajos y las fuentes son escasas en la parte alta. Otro detalle importante es que transcurre casi íntegramente por encima de los 3000 metros, por lo que nos cansaremos más. 

De las dos posibilidades, que son subir por el lado Sur o por el lado Norte, elegimos la segunda, al ser más cercana y permitir salir desde casi 2500 m de altura, ahorrándonos bastante desnivel. Dejamos el coche al final de las pistas de esquí, poco antes de la imagen de la Virgen de las Nieves, a la altura del Albergue Universitario. Salimos de noche y empezó a clarear a mitad de camino.

La primera parte de la ascensión va atajando por la carretera. A mitad de camino sigue un camino a la izquierda, más bonito, que llega hasta el pie del Corral del Veleta. Tras un trozo de camino por la carretera tomamos la arista Norte del Veleta hasta llegar a la cima del Veleta, a 3396 m de altura. Por encima de esta cumbre sólo tenemos al Aneto y al Mulhacén. 


Clarea sobre los Peñones de San Francisco. Al fondo el CAR y diversos albergues. 

Amanece sobre la Loma de San Juan. 

Cada vez vemos más cerca el Veleta. Este trozo del camino pasa
por encima de la Hoya del Moro y el Borreguil Chico. La 
carretera queda encima y a la derecha nuestro. 

Amanece en el Corral del Veleta (3396 m). 

Cristian a buen ritmo, ansiando ya llegar a la cumbre. 

Seguimos un trozo de la carretera a la altura de Los Panderones. 

Toca asomarse al Corral del Veleta. No hace muchos años aún quedaba un glaciar.

Amanecer entre La Alcazaba (3364 m) y el Mulhacén (3479 m). 

Esto está hecho, parece decirnos Cristian. 

Hacía bastante frío y hasta me puse el gorro. 

El Mulhacén con, posiblemente, el pico Juego de Bolos delante (3018 m). 

Cristian señala la cumbre del Veleta. 

Contraluces hacia la carena Este de Sierra Nevada. 

 
Entiendo que los "borreguiles" son esas escasas 
zonas donde crece la verde hierba. 

Desde la cima del Veleta  el Cerro de los Machos (3327 m) 
y detrás el Puntal de la Caldera (3219 m).  Se ve la
pista que lleva al Mulhacén, tapado por las nubes. 


Cristian y un servidor celebrando el primer 3000 del día. 

A nuestros pies el Barranco de Guarnón. 

Contraluz en el Collado de Veta Grande. 

Tras unos instantes en la cumbre, afeada por un horroroso refugio militar pintado de blanco, descendemos por la arista Sur del Veleta hasta el collado del Veleta, donde acaba la carretera. Justo encima está el refugio libre de La Carihuela, donde paramos para almorzar merecidamente, ya bajo un confortable solecito. Estaba bastante limpio, aunque no está equipado. 


Collado del Veleta. A la derecha la larga carena hacia el Cerro del 
Caballoúltimo 3000 hacia el Oeste de Sierra Nevada. 

Collado del Veleta y refugio de La Carihuela. 

Cristian llegando al refugio de La Carihuela. Al fondo el Veleta. 
Había buenos neveros todavía, incluso en el más soleado lado Sur. 

Almorzando a 3229 m. 

Acentor alpino (Prunella collaris). Es un ave alpina, habitante estricto
de las altas cumbres, que ha quedado como reducto en Sierra Nevada. 


Tras reponer fuerzas toca un largo desplazamiento hasta el pie del Mulhacen siguiendo una pista, afortunadamente en desuso, que lleva hasta el refugio de La Caldera. Afortunadamente hay un par de atajos. El primero evita el descenso de la pista por debajo del refugio de La Carihuela. Para tomarlo seguimos unos metros la pista y en la primera curva seguimos recto en vez de girar a la derecha. Un buen camino conduce por una repisa hasta un paso equipado con cadenas. Un corto descenso nos lleva de nuevo hasta la pista. 
  
 Dejamos la pista en la primera curva y tomamos una repisa. 
Al fondo el Collado del Veleta, a unos 3200 m. 


Dejamos atrás la Laguna de Aguas Verdes. Fijaros la pista
por debajo y que nos ahorramos como un kilómetro. 

Mirando hacia adelante vemos debajo la pista y el camino de este atajo. 

Cristian en la repisa equipada con unas cadenes. 

Casi lo más complicado es el último tramo por el nevero. 

Encima el Veleta (3396 m) con su horrible refugio y a la 
derecha el Cerro de los Machos (3327 m). 

Llegando a la pista con el Mulhacén al fondo (3479 m). 

Viene ahora un largo flanqueo, en general en suave descenso, por la pista que nos llevará al pie del Mulhacén. La primera parte transcurre hasta una curiosa brecha excavada en la roca, cerca de los Crestones de Rio Seco, tras pasar por debajo del Cerro de los Machos y el collado del Lobo. 

Desde el Collado del Lobo (3150 m) las caras norte de Sierra Nevada. 

Dejamos atrás el Collado del Lobo. Encima el Cerro de los Machos (3327 m). 

Mirando atrás la Loma Púa. 

Vislumbramos el nacimiento del rio Veleta, que drena al rio de Poqueira. 

Llegamos a la brecha en los Raspones del Río Seco. 

Pasada esta brecha el camino desciende hacia la Loma Pelada. Para evitar rodearla vale la pena atajar por un collado justo por debajo de la Punta de la Loma Pelada, para descender directamente hasta la laguna y el refugio de la Caldera, al pie mismo del Mulhacén. Sin darnos cuenta prácticamente hacemos otro 3000. 

Lagunas de Rio Seco. Enfrente la Loma Pelada y a la izquierda la
Punta de la Loma Pelada (3185 m), por la que atajaremos. 
Al fondo, entre nubes, el Mulhacén y su larga loma. 

Bordeamos los Crestones del Rio Seco. Una de las guardas subía hacia el Veleta. 
Al fondo y derecha el Puntal de la Caldera (3219 m) y detrás La Alcazaba (3364 m). 

Cabecera del valle del Río Seco. 

Los impresionantes Raspones del Río Seco. 
 
Otra de las Lagunas del Río Seco. 

Me llamó la atención las curiosas lagunillas en sus extremos. 

Vimos bastantes ejemplares jóvenes de cabra Montés (Capra pyrenaica). Es muy
triste que la subespecie que le da el nombre, que era el bucardo, esté extinguida
en los Pirineos. El último ejemplar murió en Ordesa hace unos cuantos años. 

Mirando atrás el Veleta y delante el Cerro de los Machos. 

Coronando el collado al lado de la Punta de la Loma pelada (3185 m). 

Un acusado descenso nos llevará hasta el fondo de una depresión donde está la magnífica laguna de la Caldera y el refugio de igual nombre. El terreno es algo mas delicado, pero sin dificultades, por un camino trazado para evitar algunos farallones rocosos.

Laguna de la Caldera. A la Izquierda el Puntal de la Caldera (3219 m), el collado
del Ciervo o de la Mosca (3120 m) y el Mulhacén entre las nubes (3479 m). 

Un servidor iniciando el descenso hacia la laguna de la Caldera. 

Cristian va detrás. Al fondo la Punta de la Loma Pelada (3185 m). 

 Alcanzamos el refugio de la Caldera. Ya se ve el camino que asciende al Mulhacén. 

Detalle del collado del Ciervo. Toda esta vertiente está en constante erosión. 

Laguna de la Caldera desde el refugio de la Caldera. Parece más un 
lago, estany (catalán) o ibón (aragonés) de Pirineos. 

Había otro bonito ejemplar de acentor alpino (Prunella collaris). 

Dejamos el refugio de La Caldera para emprender el esfuerzo final hasta la cima del Mulhacén. Son algo mas de 400 m de desnivel por un buen y transitado camino que en unos 45 minutos nos llevará al techo peninsular, a 3479 m de altura.  Las vistas hacia La Caldera son magníficas.  

Cristian iniciando el ascenso al Mulhacén. 

El camino es muy claro y jalonado de fitas. 

Vamos ganando altura sin prisa pero sin pausa. 

Insisto en que es muy bonita. El camino de bajada desde la Punta de la Loma
Pelada transcurre en diagonal, por encima de las rocas del centro. 

Debajo nuestro Los Lagunillos. 

Alcanzamos la Loma del Mulhacén, por un terreno más pedregoso. Ya hemos
superado la altura del Puntal de la Caldera, por lo que nos queda ya muy poco. 
                                                              
La cima del Mulhacén estaba bastante concurrida, sobre todo por montañeros que ascienden desde el lado de Las Alpujarras. Las vistas son excepcionales y estuvimos un buen rato disfrutando del paisaje. Había un buen grupo de vascos y de catalanes.
También nos cruzamos con bastantes guiris en el ascenso. 


Panorámica desde la cumbre. De izquierda a derecha Veleta (3396 m), debajo 
la laguna de la Caldera, Puntal de la Caldera (3219 m), siguiendo la 
carena el Pico Juego de Bolos (3018 m) y debajo la Hoya
del Mulhacén con la rutilante laguna de la Mosca. 

Cima del Mulhacén, techo peninsular con sus 3479 m. 

 Pico Juego de Bolos (3018 m) y la Hoya del Mulhacén con la laguna de la Mosca. 

Laguna de la Mosca. Por la izquierda se baja hacia el Camino de la Estrella. 

El Veleta, debajo el Cerro de los Machos y la laguna de la Caldera a nuestros pies. 

Detalle del Pico Juego de Bolos. 

La Hoya del Mulhacén entre la niebla. 

Las posibilidades de la composición fotográfica son innumerables. 

Y mis queridas texturas también. 

Levantando acta notarial de nuestra ascensión con las 
camisetas del Centro Excursionista de Parets. 

Por si acaso hay dudas subimos al vértice geodésico. 

Toca ahora desandar el camino, aunque hicimos una variante. Una buena opción es bajar desde el Collado del Ciervo hasta el Camino de la Estrella, pero teníamos el coche casi 1000 m por encima. Esta ruta permite ver muy bien las caras Norte del Mulhacen y la Alcazaba y pasear por bosques en su parte inferior. Por tanto volvimos prácticamente por la misma ruta. El descenso hasta el refugio de la Caldera se hace más agradable tras conseguir la cima. Nos apartamos algo del camino para asomarnos al Collado del Ciervo. 

Bajando hacia el collado del Ciervo. 

Por ahí nos asomaremos. 

Habían bastantes ejemplares de ortiguera (Aglais urticae). Sus orugas se alimentan
 precisamente de ortigas. Me llamó la atención ver varios ejemplares sobre 3300 m. 

Llegando al collado del Ciervo  (3120 m) bajo el Puntal de la Caldera (3219 m). 

Panorámica desde el collado del Ciervo. De izquierda a derecha  Puntal de la Caldera
 (3219 m), Pico Juego de Bolos (3018 m), Hoya del Mulhacén, laguna de la Mosca
y a la derecha la impresionante cara Norte de la Alcazaba (3364 m).  

 Se puede apreciar la repisa que atraviesa la Cara Norte del Mulhacén, 
llamada Tajo del Mulhacén. Queda para otra ocasión. 

 Detalle del Pico Juego de Bolos (3018 m).  

 Nos despedimos, o más bien un hasta luego, 
de las caras Norte de Alcazaba y Mulhacén. 

De regreso en el refugio de la Caldera. 

Volvimos a ver una pareja de ejemplares jóvenes de cabra montés. Me sorprendió ver ejemplares tan jóvenes sin la tutela de hembras maduras. En los rebecos los rebaños de hembras y jóvenes son dirigidos por hembras experimentadas. 




 Una última foto a la laguna de la Caldera. 

Estamos ya bastante cansados y preferimos seguir la pista en vez de atajar, como a la ida, por la Punta de la Loma Pelada, dando más vuelta (al menos 1 Km más), pero ahorrándonos unos cuantos metros de desnivel, retomando la pista antes de las Lagunas de Rio Seco. 


Ligero descenso hacia la pista. Habían bastantes ciclistas. 

Mirando atrás la Loma del Mulhacén. 

La pista permite avanzar a buen ritmo. 

Mirando atrás la Caldera y el Mulhacén. 

Volvimos a ver a otro grupo de jóvenes ejemplares, supongo que del año, de cabras monteses. Eran bastante confiadas y se dejaron fotografiar muy bien. 





Seguimos en suave ascenso hacia los Raspones de Rio Seco hasta traspasar la brecha que los atraviesa. El día ha ido mejorando y hace un sol magnífico. Vamos notando el efecto de las horas caminando, especialmente por el hecho de que llevamos casi todo el día a más de 3000 m de altura. 

Lagunas y Raspones de Rio Seco.  

Ascendiendo suavemente hacia la brecha en los Raspones de Rio Seco. 

Asomándonos a las abruptas caras Norte. 

Mirando atrás lagunas de Rio Seco, Loma Pelada y al fondo el Mulhacén. 

Traspasamos la brecha en un inhóspito paisaje. 

Seguimos recorriendo el camino en sentido inverso hasta pasar el Collado del Lobo y llegar debajo del Cerro de los Machos. Decidimos volver por el mismo paso equipado con cadenas, ahora ya más familiar. Además Cristian quiere ir acostumbrándose a las alturas.  Enseguida llegamos al refugio de La Carihuela, donde descansamos antes de bajar hacia el coche. 

Collado y Pico del Veleta. Se ve la pista antes de desviarnos hacia el paso equipado. 

Nos despedimos del collado del Lobo (3150 m). 

Unas texturas...por el amor de la Virgen de las Nieves.
 Por cierto, Nieves es el nombre tradicional en Granada. 

Ocasionalmente vemos algunas flores. Quizás se trate de un endemismo. 

Llegamos al paso equipado para ahorrarnos subir y bajar. Ahora ya le tenemos cogido el tranquillo y además es menos vertiginoso de subida. Es más fácil de lo que parece. Ahi van las imágenes. 





Se ve perfectamente que el camino está tallado en la roca. 

Llegamos al refugio de la Carihuela y el Collado del Veleta. 

De adelante a atrás Raspones de Rio Seco, Loma Pelada y Mulhacén. 

Reto conseguido. Tomamos unos bocados para reponernos en la Carihuela. 

Entre dos tresmiles: Veleta y Mulhacén. Dos de una tacada. 

Sólo nos queda un ya conocido descenso, atajando en ocasiones por la carretera, para recuperar el coche. Lo hacemos a buen ritmo, sabedores de que nos espera una Alhambra en el primer chiringuito que encontremos, en esta ocasión el Albergue Universitario. 


Hacia el Oeste los Tajos del Nevero (3213m)  y el Pico del Cartujo (3150 m).

Bonitas texturas bajando por la carretera. 

Asomándonos al Corral del Veleta el Puntal de Vacares (3143 m), 
La Alcazaba (3364 m) y Mulhacén (3479 m). 

Detalle de La Alcazaba entre las nubes. 

Podría pasar por el cráter del Veleta. 

Recorriendo el familiar sendero a la derecha de la carretera. 

Incluso hay  algún pequeño tramo de ligero ascenso. 

Ya hemos bajado un buen trozo desde el Veleta. 

El Borreguil Chico y la Hoya del Moro bajo el Veleta. 

Esta aromática planta al final no era la famosa manzanilla de Sierra Nevada. 

Atajando por la carretera, que solo pisamos para cruzarla. 
Al fondo los Peñones de San Francisco. 

Pasamos al lado de uno de los observatorios. 

Cerveza y tapa (por supuesto) en el Albergue Universitario. 


1 comentario:

  1. Muy chulo. Supongo que una vez en la vida hay que ir. Muy bi documentafo.
    V.

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