viernes, 6 de enero de 2017

Uganda 2016. Quinta jornada: camaleónicas sorpresas.

Uganda 2016: Broadbill Forest Camp-Impenetrable Forest-Mubwindi Swamp. 
(12 de Octubre 2016)

Día dedicado enteramente (alrededor de 8 horas) a un  trekking ornitológico por el Bwindi Impenetrable National Park.  Es preciso decir que los mejores momentos no fueron protagonizados por aves, sino por otra fauna, como vereís a continuación. De ahí el título "camaleónicas sorpresas", alusivo no sólo a tan cambiante reptil sino a otro inesperado acontecimiento. La aves del bosque tropical cuestan bastante de ver y me da la impresión de que son menos abundantes que en otros hábitats. 

En todo caso fué un bonito paseo circular hasta una zona húmeda (Mubwindi Swamp) y que nos deparó al final una grata sorpresa. Como es habitual en estos países era obligatorio estar acompañado de un guarda armado con un vetusto AK-47, supongo que por si nos topábamos con un elefante africano de bosque, especie más pequeña que el de sabana, pero también muy peligrosa. Sólo vimos sus excrementos.  Nos acompañó además un guía local. 

Salimos temprano, como siempre, del Centro de Información del Parque. El guarda que nos acompañó durante la jornada era un poco serio, pero al final se soltó un poco y se enrolló bastante bien. El camino se inicia tras unos metros por la pista y suele ser el mismo que el del trekking de los gorilas. Enseguida empezamos a ver nuevas especies de aves. La calidad de las imágenes es baja, debido a la mala luz y al importante recorte que llevan. 


Iniciando la marcha. Enseguida tomaremos un camino a nuestra derecha. 

Contraluces en el Bwindi Impenetrable Forest. 

Anteojitos senegalés o Yellow White-eye (Zosterops senegalensis). 

Bulbul cabecioscuro o Mountain Greenbul (Andropadus  nigriceps). 

Apalis carinegro o Mountain Masked Apalis (Apalis personata). 

El camino empieza a descender, tras recorrer una de las carenas. Ocasionalmente se nos abren ventanas en el bosque que nos permiten contemplar la extensión de este llamado Bosque Impenetrable. Afortunadamente, al encontrarnos a unos 2000 m de altura, la temperatura es muy agradable. Tampoco hay insectos que nos molesten, excepto las pequeñas y feroces hormigas.  A falta de aves buenos son los herpetos. 


Uno de los miradores del camino. 

Que difícil debe ser avanzar por estos bosques...

Consultando la guía ante las dudas o confirmando algún ave.

Una nueva lagartija para clasificar. 

Al igual que esta bonita rana arborícola. 

Visión ventral de la ranita. 

Otra nueva ranita. 

Visión dorsal del batracio. 

Ahora la bajada se hace mas pronunciada y desde una zona con un claro vemos nuestro objetivo, el Mubwindi Swamp, por donde daremos un llano paseo. Vemos muy a lo lejos una de las aves-estrella, el turaco gigante, que afortunadamente veremos mejor más adelante, y alguna otra ave muy interesante. 

Vista del Mubwindi Swamp. Bajaremos hasta el extremo de la izquierda. 

Turaco gigante o Great Blue Turaco (Corythaeola cristata). 
Es realmente un ave de notorio tamaño.

Do ya think I'm sexy?  Watch here.

Abubilla arbórea cabeciblanca o White-headed Wood-hoopoe (Phoeniculus bollei).

Seguimos bajando hacia el Mubwindi Swamp y llegó una de las sorpresas del dia. Creo que fué Alfred quién lo vió, para regocijo de Oriol. Se trataba de un camaleón tricorne, en concreto un camaleón de Jackson (Trioceros jacksonii), reptil que yo creía que sólo habitaba en Madagascar. Hizo las delicias de todos nosotros durante un rato, hasta que lo dejamos en un árbol para que descansara de nuestras manipulaciones. Es especialmente abundante a partir de 3000 metros de altura y tiene 3 subespecies. Es un reptil realmente expectacular. Sobran los comentarios a pie de foto. 

Poco antes de la grata sorpresa. 









Video grabado por Oriol con el iPhone

Llegamos finalmente al final de la bajada y tomamos un llano camino que nos lleva al Mubwindi Swamp, donde teníamos que ver a una rara y escasa ave que por cierto me perdí. Es un sendero muy agradable, que bordea un cristalino arroyo y que se abre a la zona húmeda. En mi fuero interno esperaba ver pastando en el swamp a los elefantes, pero no se produjo esta cósmica concatenación de visiones. Aprovechamos para almorzar a la sombra del bosque, en el mismo límite del swamp.

Esta mariposa me recordó mucho a nuestra Polygonia c-album, pero sin la c blanca. 

Enorme miriápodo. Realmente tienen muchas patas...

 Hoy Tony era la estrella. Realmente le queda bien ese pañuelo...

Pinzón negro de pecho blanco o White-breasted Negrofinch (Nigrita fusconota). 

 Tejedor insigne o Brown-capped Weaver (Ploceus insignis). 

Deformación catalana: siempre pensando en los hongos...

Vista del Mubwindi Swamp. 

Me faltaron los elefantes...

Agradable almuerzo. Vistas las anteriores experiencias ya lo pusieron un poco más
generoso. Y por supuesto con el omnipresente huevo duro. 

AK-47. Todo un símbolo. Su nombre real es 
Avtomat Kaláshnikova, modelo 1947. 

Mijail Kaláshnikov (1919-2013) fué un longevo militar soviético que combatió en la Segunda Guerra Mundial contra los nazis, siendo herido en la batalla de Bryanks. Convaleciente en el hospital empezó a diseñar una nueva arma que sustituyera a las anticuadas carabinas soviéticas, de difícil uso y con muchas complicaciones. Al salir del hospital en 1942 Kaláshnikov se fué inmediatamente al taller. Finalizó su primer prototipo en 1946, llamándolo AK-46. La versión definitiva fué la de 1947, y desde entonces se ha llamado AK-47. Fué el arma oficial del Ejército Rojo hasta el año 2000 y es el fusil de asalto más fabricado de la historia, con más de 80 millones de unidades, de las que siguen funcionando entre 30 y 50 millones de ellas. Desgraciadamente la mayoría en África y Oriente Medio, al ser de bajo precio, donde ahora es un símbolo, como lo fué inicialmente en las guerrrillas marxistas. Menos la última frase todo es de Wikipedia. 

 Siempre vigilantes, no como yo...

Volvemos por el mismo camino hasta una bifurcación, tras una fuerte subida, que nos conducirá al inicio del trekking por otro camino, realizando or tanto un recorrido casi circular. Descansamos unos minutos en la encrucijada, momento en que llegó la segunda sorpresa del día. Se trataba de un pequeño antílope de bosque, llamados duiker, que tuve a escasos metros por encima mío. En el lago Mburo vimos a un Busk Duiker (Sylvicapra grimmias), pero no me dió tiempo a fotografiarlo. 

 Se lo pasaban en grande...

 Retrato de nuestro guarda. 

 Duiker del Ruwenzori o Rwenzori Red Duiker (Cephalophus rubidus). 

 Ahora de lado. Son muy bonitos. 

Como era  de suponer el camino de regreso era e subida, aunque sin grandes pendientes, excepto tramos concretos. Es un camino menos transitado y peor conservado y frecuentemente teníamos que esquivar o saltar sobre arboles caídos. Un paseo muy agradable, siempre con el aliciente de poderte topar inesperadamente con un elefante o, por que no, un gorila de montaña. 

El guarda era bajito. Pero es que Carlos es muy grande...

Indicador enano o Dwarf Honeyguide (Indicator pumilio). 

Preciosa rana arborícola. 

Notas de color en el bosque. 

O como en esta caso quizás notas de amor. 

Ya cerca de finalizar el recorrido de repente oímos ruidos entre la espesura. El guarda nos dijo que eran gorilas, pero que no podíamos acercarnos ni tomar fotos, ya que no habíamos pagado el "impuesto revolucionario". Vimos 3 gorilas, bastante cerca. De hecho Oriol y Toni se dieron por satisfechos y renunciaron a verlos al día siguiente, con el consiguiente ahorro. 

 Momentos antes de toparnos gratamente con los gorilas de montaña. 


Ya estábamos muy cerca del Centro de visitantes, de interpretación o como se llame. Le dimos una propina a nuestro guarda por haber consentido la visión de nuestros primos hermanos. Tras regresar al Centro de visitantes Carlos fué a visitar una escuela con la que había colaborado en la periferia del Parque. Aproveché para fotografiar a los cuervos. Acabamos la jornada con una magnifica cena tras una ducha caliente en el Broadbill Forest Camp. Absolutamente recomendable. 

 Interminable sucesión de bosques. 

 Posiblemente es un  mono de montaña o L'Hoest's Monkey 
(Allochrocebus Ihoesti). Carlos le tiró la foto desde el vehículo. 

Cuervo blanco o Pied Crow (Corvus albus). Es muy frecuente. 

El grupo al completo al acabar el trekking pajarero. 

Broadbill Forest Camp. 

Nuestro confortable alojamiento. Suele ser habitual que las camas estén en 
una gran tienda de campaña y la ducha y el lavabo en un edificio anexo. 

Para acabar recordar que no todo es fauna, paisaje o retratos.  










2 comentarios:

  1. Este viaje y todos los que publicas en el blog merecen un reconocimiento público, vamos, de nota bien alta. En primer lugar por lo ameno de la lectura y por supuesto por la información que lleva, las imágenes son otro aliciente más, el punto de vista genial del fotógrafo (Josemi) hace que las imágenes cobren vida. Las sigo aunque no me prodigue en comentarlas, no hay perdón. Lo dicho Jose, relatos e imágenes dignas de los mejores documentales, "yes mundial" como diríamos por estas tierras. Un saludo

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  2. jajaja...A ver si te prodigas mas en el tuyo...Un abrazo.

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