lunes, 13 de noviembre de 2017

La Segarra: Castillos, secanos y aves. La Alta Segarra (3º parte)

La Alta Segarra. 13 de Junio de 2014 y 2 de Abril de 2017. 

Un poco tarde os completo la tercera entrega de esa poco conocida pero entrañable comarca del interior de Catalunya. Tierra de cultivos de cereal, bosques en los márgenes y castillos. Como ya he comentado dudo mucho que haya una comarca con tantos, aunque pequeños castillos. Muchos de ellos están en ruinas o se han convertido en mansiones. 

He dejado para el final la llamada, posiblemente con una cierta arbitrariedad, Alta Segarra. En este caso el espacio geográfico estaría definido, aproximadamente, por la cuenca del rio LLobregós, de manera similar a la Media Segarra (El Siò) y la Baja Segarra (El Cercavins y el Ondara). Por el norte la comarca pierde la placidez y montañas de moderada altitud limitan con el Bages. 

Son lugares que deben de visitarse preferentemente en Primavera y Otoño, por el colorido de los campos cereal y los contrastes otoñales. Nunca me cansaré de recordar la belleza de esas comarcas interiores, pobres y olvidadas con frecuencia, pero que precisamente por eso han mantenido su encanto. 

Al final de la entrada os pongo los enlaces a las dos primeras partes (Baja y Media Segarra). Como ya hace más de tres años de la visita a algunas localidades en alguno de los casos, es posible que me haya equivocado, por lo que no tomeís esta entrada al pie de la letra. En esta última entrega tampoco vereís imágenes de aves, porque fué una visita más turística que ornitológica. 

Entrando desde Guissona, conocida por su afamada Área de Guissona, nos dirigimos hacia una zona húmeda, aunque cuando la visitamos estaba bastante seca. Está justo debajo de la localidad de Granollers. Se puede llegar por pista o por un precioso camino, que aconsejo fervientemente. 


Característico paisaje de la Segarra. Al fondo el Prepirineo. 

El pequeño núcleo de Granollers. 

Desde arriba vemos el carrizal al fondo del valle. 

Poco antes de llegar contemplamos al fondo el Montsec de Rubies. 

Vista del carrizal y encima el minúsculo Granollers. 
Nada que ver con la capital del Vallès Oriental. 

Mirando hacia el Noreste aún queda nieve en el Port del Compte. 

Volviendo por el precioso de camino de Granollers a sus aiguamolls. 


Desde aquí es fácil llegar hasta la localidad de Florejacs, que estaría más bien en la Media Segarra, pero que nos dejamos por visitar en la anterior entrada. Vale la pena pasearse por sus calles. Aunque es un pueblo minúsculo tiene nada más y nada menos que dos castillos, ambos habitados. Adivinareís que las fotos son de otro día, el año 2014, menos soleado y en el que incluso nos lloviznó un poco. Las fotos se comentan solas. 











Descendiendo hacia el valle del Llobregós encontramos la localidad de Sanaüja, al lado de la riera de igual nombre. Lo más destacado sin duda es su castillo, que aunque está en ruinas aún conserva alguna estructura de lo más curioso, más similar a una iglesia que a otra cosa. Las imágenes también corresponden al nublado 2014. De nuevo me parece innecesario poner un pie a cada foto. 








Muy cerca de Sanaüja, encima del Serrat de Balaguer, está Castell de Ribelles, pequeña localidad coronada, como no, por una iglesia y un castillo. Pertenece ya a la comarca de La Noguera. Vale la pena subir y gozar de las magníficas vistas sobre el valle del rio Llobregòs. Desgraciadamente no pudimos visitar la iglesia y el castillo, totalmente restaurados y que datan del Siglo X. Sobran de nuevo los comentarios.











Desde Sanaüja sale una pista que asciende hasta uno de los rincones más bonitos de la Alta Segarra. Nos referimos a Lloberola, enclavada en lo alto de una loma, con una iglesia y los restos de la torre del castillo, árabe y luego prerománico. También son de destacar unas antiguas tumbas medievales. 







Desde Lloberola descendemos de nuevo hacia el valle del Llobregós hasta llegar, ya por una carretera hasta Biosca, localidad de la que no guardo ningún recuerdo especial (que no se enfaden los lugareños), por lo que continuamos hasta Torá, donde a la entrada por el Este, junto a la carretera hay un buen y conocido restaurante. Vale la pena perderse por sus calles. Al escribir estas líneas me he dado cuenta que el Torá es la ley judaica. Ignoro si el nombre de la localidad tienen alguna relación religiosa o si se refiere a la tora, planta más bien pirenaica, por lo que es difícil esta relación. Es de las pocas poblaciones que ha ganado habitantes en las últimas décadas. 











De Torà sale una pista en buen estado que sigue por el margen izquierdo de la riera de Cellers. Nos llevará hasta el monasterio del mismo nombre, enclavado en un solitario y bonito lugar. El camino es muy agradable y paramos antes en el pequeño núcleo de Cellers. En esta caso si que vale la pena comentar las imágenes. 


Cellers. Encima la iglesia de Sant Martí. 

Subiendo a la iglesia vemos al fondo el Monasterio, que queda algo apartado. 

Iglesia de Sant Martí de Cellers. 

Hay mas gente que hace ramos de flores secas...

Unas texturas...

Campos de cereal subiendo hacia el monasterio. 

Monasterio de Sant Celedoni de Cellers. Data del Siglo XII. 

Contraluz en el monasterio. 

Me da la impresión de que es un peral. 

Sin duda los monjes podía rezar y meditar sin molestia alguna. 



Volvimos por el mismo camino para tomar la carretera C1412 ya volviendo para Barcelona. Es sin embargo interesante parar en el Monasterio de Santa Maria del Priorat, al lado de Castellfollit de Riubregós. Se empezó a construir el Siglo XI y estaba también cerrado, pero vale la pena dar un vuelta por sus edificaciones. 






Torre del Ballester y Torre del Castell, en Castellfollit de Riubregós. 

Ya de vuelta hacia Barcelona, vale la pena parar en la iglesia y el castillo de Santa Fe de Calonge. Aunque está fuera del límite geográfico de la Segarra (está en el Alto Anoia), depende de la localidad de Calonge de Segarra, lo cual dice mucho de la vinculación de la localidad. 

Llegando a Santa Fe de Calonge. 

Se aprecia el castillo y la iglesia. 

Detalle de la iglesia subiendo hacia el castillo. 

Panorámica hacia el Norte. 

Panorámica hacia el Sur. 

Campos que ya drenan hacia la cuenca del Anoia. 

Restos del castillo. 

Curiosa vista desde el castillo. 

Ya volviendo a casa amenazador cielo sobre Les Agulles de Montserrat. 

Para ver la entrada de la Baja Segarra pinchar aquí.

Para ver la entrada de la Media Segarra pinchar aquí.  

2 comentarios:

  1. Buenísima entrada Josemi, la verdad es que dan ganas de darse un garbeo por tan "bonica" comarca.
    Aúpa!!!!

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